En el próximo episodio de La Promesa, Manuel, desesperado por la desaparición de Jana, toma una decisión crucial. Tras días de angustia y noches sin dormir, se enfrenta a su padre, Alonso, suplicándole que involucre a la Guardia Civil en la búsqueda de su prometida. Aunque al principio reticente, preocupado por las habladurías y el impacto social, Alonso finalmente cede al ver el sufrimiento de su hijo. Esta acción marca un punto de inflexión, ya que la llegada de los agentes Mendieta y Olmo al palacio desata una serie de tensiones y revelaciones.
Cruz, siempre calculadora, se ve amenazada por la investigación. Petra, mientras tanto, aprovecha la situación para ganar influencia, sugiriendo usar sus contactos para desviar la atención de la Guardia Civil. Por otro lado, Vera y Marcelo, armados de valor, deciden finalmente denunciar al Duque de Carril, a pesar del riesgo que esto implica para ellos mismos. En contraste, Catalina, atrapada entre el miedo y la verdad, se enfrenta a la posibilidad de revelar que el padre de su hijo no es Pelayo, sino Adriano.
Mientras las tensiones crecen en el palacio, Manuel se entera de una pista sobre Jana: una mujer herida con su descripción fue vista en un pueblo cercano. Desafiando a Cruz y a las convenciones, Manuel decide partir para buscarla, dejando claro que no habrá ceremonia sin ella. El episodio promete ser un torbellino de emociones y decisiones drásticas, con cada personaje enfrentando sus propios dilemas y secretos.
La llegada de la Guardia Civil no solo sacude la tranquilidad del palacio, sino que también amenaza con desmoronar los planes de Cruz y exponer las verdades que todos intentan ocultar. El desenlace está lleno de incertidumbre, y las alianzas en el palacio se ponen a prueba. ¿Logrará Manuel encontrar a Jana antes de que sea demasiado tarde?
