‘Sueños de libertad’, resumen semanal de los capítulos 214 al 217 del 30 de diciembre al 3 de enero en Antena 3: Jesús vuelve a las andadas

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Esta semana en ‘Sueños de libertad‘, la traición de Joaquín empujó su relación con Gema hasta el borde del abismo. Digna, con un sexto sentido afilado por el tiempo, empezó a intuir que algo turbio se escondía tras las apariencias. Miriam, desgarrada por la culpa, instó a Joaquín a luchar por el amor perdido, mientras Gema, iracunda, exigió el despido inmediato de la secretaria, emblema de su humillación.

Tasio se la jugó por Marta en ‘Sueños de libertad’

Marta, audaz y resuelta, propuso a su padre un negocio que podría desafiar el imperio de Floral. Aunque Jesús se opuso, Damián no tardó en dejarse seducir por la ambición de su hija. Pero la relación con Eladio ensombreció la confianza familiar. Damián enfrentó a Tasio por haber introducido a Marta en los dominios de este hombre turbio. Tasio, dominado por la inquietud, juró hacerse cargo de las consecuencias de la extorsión que amenazaba con desestabilizarlos. Fina, víctima de susurros venenosos sobre su orientación, decidió tomar las riendas de su destino y reconsiderar su lugar en la tienda. Agradecida, reconoció la intervención de Damián en su defensa frente a Santiago.

Julia, superada ya la sombra de la tosferina, irradiaba una felicidad contagiosa ante la posibilidad de tener un hermanito. Este júbilo despertó en Begoña una reflexión profunda: quizás fuera el momento de apoyar a Jesús en su deseo de adoptar. Sin embargo, los rumores volaron, y María, incapaz de contener su lengua, reveló los planes de la pareja a Andrés. Este, envuelto en una tormenta de celos y rencor, fue calmado por las palabras de Julia, quien con la inocencia de un niño, le confesó su anhelo mientras compartían el placer sencillo de montar un tren de juguete.

Jesús, hábil manipulador, persuadió a Julia para que plasmara en una redacción sus deseos, conmoviendo hasta las lágrimas a Begoña. Pero la verdad no tardó en salir a la luz: al descubrir la estrategia de su esposo, Begoña tomó una decisión inesperada, rompiendo el hilo de la ilusión tejida por Jesús. En el seno de la familia Merino, Don Pedro descubrió una traición urdida a sus espaldas, mientras Jesús lo acusaba de ser un informante para sus primos.

Damián sembró una duda en Jesús en ‘Sueños de libertad’

En paralelo, en la colonia, don Agustín, bajo la sombra de la moral, insistió a Digna en persuadir a Luz y Luis para que formalizaran su unión: “No podían vivir en pecado”, sentenció con solemnidad. María, cansada de mendigar la atención de Andrés, le exigió, con toda la fuerza de una mujer herida, que cumpliera con sus deberes como esposo. Al mismo tiempo, Damián sembró en Jesús la sospecha de una posible relación entre Digna y don Pedro. Este último, experto en explotar las debilidades ajenas, no tardó en convertir esta información en una pieza clave para sus propios intereses.