Tasio, atrapado por los celos y la incertidumbre
Las dudas están consumiendo a Tasio, quien se siente cada vez más inseguro y celoso de Jacinto, el nuevo compañero de trabajo de su esposa, Carmen. La sospecha de que Jacinto podría estar interesado en ella no le deja en paz. Todo comenzó la noche en que Carmen le informó que tendría que quedarse hasta tarde en la fábrica para trabajar junto a Jacinto. Esa noticia cayó como un jarro de agua fría para Tasio, que no pudo ocultar sus celos.
Desde entonces, la mente de Tasio no ha parado de darle vueltas a la situación. Por un lado, tiene la extraña intuición de que Jacinto podría ser homosexual, pero, por otro, teme que lo que realmente ocurre es que a su compañero le atrae Carmen. La incertidumbre lo está enloqueciendo, y necesita saber la verdad para recuperar la tranquilidad.
Decidido a aclarar sus sospechas, Tasio confronta a Jacinto directamente. En un tono inquisitivo, le pregunta si tiene novia, esperando encontrar alguna pista que revele algo sobre su vida sentimental. Sin embargo, Jacinto le responde con un escueto “no”, sin darle más explicaciones. Tasio, incapaz de frenar su ansiedad, insiste con preguntas cada vez más incómodas, buscando a toda costa confirmar si Jacinto es homosexual o si, por el contrario, siente algo por Carmen.
Finalmente, Tasio no puede contenerse más y le suelta, con evidente enfado: “No me gusta un pelo lo que te traes con mi mujer”. Jacinto, harto de las insinuaciones y del tono acusador, le responde con frialdad y determinación: “No vas a poder resolver tus dudas, porque no pienso decirte absolutamente nada”. La tensión entre ambos se hace palpable, y Jacinto se despide con una última sentencia, dejando a Tasio sumido en el desconcierto: “Te vas a quedar con las ganas de saberlo”.
La conversación solo empeora la situación de Tasio, quien ahora está más confundido y desesperado que nunca. Su miedo a perder a Carmen lo está consumiendo, pero la actitud desafiante de Jacinto no hace más que alimentar sus inseguridades. Sin respuestas claras, Tasio se enfrenta a un dilema emocional que amenaza con desmoronar su relación y su propia estabilidad.